Psicología en el embarazo

Socialmente el embarazo es una etapa repleta de momentos especiales en la vida de la mujer y la pareja. Sin embargo, esta lleva consigo cambios psíquicos, físicos, en la rutina y en los hábitos de la persona que pueden influir en sus emociones, generando en muchos casos sensación de miedo, inseguridad, ansiedad y angustia en el embarazo que no siempre se consigue gestionar.

La ansiedad en el embarazo es normal, incluso, en su justa medida puede ayudarnos a tomar decisiones necesarias durante el proceso, por ello es necesario distinguirlo de los nervios y preocupaciones adaptativas respecto a esta nueva situación.

Durante la gestación las hormonas cumplen un papel fundamental en la variación emocional desde las primeras semanas hasta el final del embarazo. Sin embargo, cuando esto comienza a ser excesivo y vemos que la sintomatología se agrava es conveniente ponernos en manos de un profesional.

Hay diferentes causas que derivan en un aumento exponencial de la ansiedad durante el embarazo.

• Preocupación por la inexperiencia como madre
• Preocupación por el desarrollo del bebé y curso del embarazo
• Creencias sobre lo que conlleva ser madre
• Experiencias negativas de embarazos anteriores
• Falta de apoyo
• Dificultad para gestionar emociones
• Disminución de autoestima tras cambios fisiológicos
• Estrés por la preocupación de factores externos al embarazo como: citas médicas, controles, trabajo, tener todo preparado para su llegada, etc.
• Temor al parto y posibles complicaciones, miedo en el embarazo…

A priori, como hemos reflejado anteriormente, la ansiedad es una respuesta normal que nos permite estar alerta y activar mecanismos para afrontar una situación determinada. Sin embargo, esta puede convertirse en un problema cuando es desproporcionada, nos condiciona o limita causando malestar.

Existen distintos recursos para poder abordar la ansiedad en mujeres embarazas como:

• Descansar y bajar el ritmo del día a día. Delegar tareas y reducir nuestros niveles de exigencia nos ayudará a escucharnos y responder a lo que necesitamos.
• Talleres de relajación y meditación. En estos se pondrá en práctica la inhalación y exhalación profunda y calmada para abordar la sintomatología derivada de la ansiedad como palpitaciones, hiperventilación, etc.
• Hacer ejercicio de manera regular como salir a caminar, yoga o actividad física para embarazadas.
• Ventilación emocional. Expresar nuestros sentimientos, ansiedad, miedo, inseguridad a personas con las que tengamos confianza.
• Cubrir necesidades básicas. Es importante alimentarse y dormir adecuadamente.
• Grupos de apoyo donde acudir junto a otras futuras madres donde puedas sentirte comprendida y acogida.

No obstante, sentir ansiedad durante el embarazo puede llegar a ser muy duro. Si notas que has utilizado alguno o todos estos recursos y no consigues sentirte mejor, es importante que contactes con un psicólogo especializado y cuanto antes puedas empezar con terapia psicológica para embarazadas.

Es esencial ponerse en manos de un especialista para abordar el caso de una manera individualizada y que se determine cuál es el mejor tratamiento. Si necesitas más información no dudes en contactar con Psicología EGS y empezar cuanto antes tu proceso de terapia con nuestra psicóloga del embarazo. 

En casos graves es posible que se haga uso, de manera paralela a terapia, de un tratamiento farmacológico apto en el embarazo prescrito por un especialista en medicina psiquiátrica.